Sucesores de Brivio y Cía. volvió a concretar otro gran remate este viernes 22 en la Rural de Tandil, y con dos martillos muy firmes, colocó el total de las haciendas en un lindo remate gordo, invernada y cría.

Ricardo Arzoz y Matías Leguizamón se repartieron las acciones ante un embrete que ocupó gran parte de las instalaciones ferias.  Mucha vaca, linda oferta de consumo, invernada de la zafra y vientres preñados y paridos para el final, era el combo interesante que la más antigua puso a disposición de muchas manos que se acercaron a los corrales de calle Pedersen.

Ante un mercado abarrotado de remates y con ingresos importantes en Liniers y el MAG, en Tandil las haciendas a la balanza salieron con fluidez, y a precios sostenidos todo lo que fue gordas, manufactura y conserva, encontraron respuesta rápida.  Toros siempre firmes y una oferta importante de consumo al final, marcaban que el primer tercio llegaba a su fin.

La invernada volvió a cargar los corrales de la Rural tandilense, y si bien la firma no se caracteriza por grandes encierres en esta categoría, los terneros y terneras de esta zafra ameritaban tener su lugar en la feria. Machos y hembras, en buen número, salieron al ritmo que marcan los remates, y con firmeza respaldada por la calidad ofrecida, los compradores levantaron su mano sin dudar.

Un gran acompañamiento de remitentes y oferentes se entreveraron en las calles adoquinadas, que para el final ofrecía un lindo conjunto de vientres preñados y paridos. Sin bien estamos en la puerta del invierno y los campos se achican, las manos de a poco se asomaron, y en un ida y vuelta habitual cada una de las categorías se fueron colocando.

Dos martillos para un lindo remate hicieron que la semana en Tandil cerrara de muy buena manera, en un momento donde las haciendas salen en cantidad, y donde el respaldo y acompañamiento fiel se ponen de manifiesto.