
Quemando las calculadoras
Los 83 años de Arribere, Ugarte y Cía. fueron celebrados a puro martillo, porque el mediodía caluroso de Rauch dejó una venta más que sostenida con valores firmes en cada uno de las categorías, y calculadoras gastadas que no pararon de dividir y multiplicar.
Más de mil cien vacunos se repartieron entre gordo, invernada y vientres cargando de buena manera los corrales de la feria que tiene la Sociedad Rural local. Con poca oferta en Liniers, más invernadores y criadores, la jornada entre sol y nubes iba tomando color, en una interesante venta de cumpleaños.
La vaca mostró una firmeza más que interesante de principio a fin, y entre gordas, manufacturas y conserva empezaron a marcar el camino de una tarde trazada por la agilidad. Manos constantes, ofertas generosas y operadores deseosos de completar jaula, se entreveraron con el martillo de Mariano, para en media hora dejar todo lo al kilo listo para despachar.
Machos y hembras eran la continuidad de lo que ya era una tarde plenamente ganadera, y con la calidad que ofrece Rauch, sin importar la época del año, salían al ruedo de la mano del experimentado Julio D´Cristófaro. Veintiocho minutos le bastaron al martillero para que los novillitos y terneros volaran en agilidad y precios, dejando la vara bien alta para la continuidad a cargo de Mariano Pallazo.
Fila de terneras, mas vientres preñados y paridos, le iban a dar el cierre al festejo aniversario de la Consignataria, y como sucedió en las categorías previas, las buenas manos y ofertas constantes surgían de un lado y del otro de los corrales. Valores sostenidos sumados a una época interesante para invertir fueron las claves del cierre de la subasta, que hasta el último corral contó con más de un oferente.
Arribere, Ugarte y Cía. tuvo su jornada de fiesta, porque 83 años no se cumplen fácilmente todos los días, y como buena consignataria representativa de la ciudad, lo celebró de la mejor manera posible: con amigos y a puro martillo, haciéndole honor a la Capital del Remate Feria.