
No hay contexto que interfiera en lo que se hace bien
Los Tigres de Lafontaine tiene como lema equilibrio rentable, y eso sucedió en la tarde de hoy desde la Sociedad Rural de Azul, donde la concurrencia sabía lo que iba a encontrar y pago valores importantes en un contexto nada fácil, pero con la esperanza de que pueda mejorar, y si de eso hablamos los ganaderos son unos apasionados y esperanzados en mejorar.
Con una cantidad interesante de vientres toros Angus PP y PC, el martillo de Néstor I. Goenaga sonó de buena manera en la pista centran de la Rural, y con tribunas que acompañaron la jornada, el ida y vuelta fue constante. Manos repitentes, siempre alguna nueva que acepto la invitación para ofertar, fueron los condimentos necesarios para que el trabajo de Juan Ignacio Goenaga y Martín Iturralde fuera más llevadero, sin necesidad de tironear demasiado.
Todo lo ofrecido se colocó a precios de plaza, e inclusive con algunos máximos importantes, pero lo parejo de la torada también estuvo en lo sostenido de los precios, para que el balance final sea positivo entendiendo el momento país que se atraviesa. Una hermosa tarde ganadera se redondeó con este clásico remate que año a año sigue sumando adeptos en una plaza donde las cabañas muchas veces no suelen brillar, pero si te trabaja en un equilibrio rentable, no hay nada que pueda salir mal.