
La vaca y el toro protagonistas en Tandil
En un viernes cargado de remates, Pedro y Raúl Alonso Ganados inició su 2022 con un gran encierre y con valores destacados, principalmente en el gordo, dando el puntapié en una linda tarde ganadera desde la Sociedad Rural de Tandil.
Más de seiscientas cuarenta cabezas cargaron los corrales de la feria con tres categorías bien marcadas, donde en cada una de ellas las manos se levantaron con la premisa de cerrar la semana comprando. Hacienda a la balanza, consumo e invernada fue la interesante oferta que los hermanos Alonso ofrecieron desde la ciudad serrana.
Con postergaciones de por medio, lluvias protagonistas y un acumulamiento de remates en el final del mes de enero, la consignataria salió a la cancha con la firme intención de no dejar nada sin vender. Firmeza en las vacas y en los toros muestran que el mercado pareciera no haber encontrado techo, y con operadores interesados en éstas categorías, Luis Biaus y Pedro se repartían el martillo.
Valores de plaza y continuos a lo que fue la semana, los corrales de gordo se fueron colocando después de que la venta haya pasado por el consumo. Novillitos, novillos y vaquillonas completaron la primera fila de la feria, y con un interés no tan sobresaliente hicieron trabajar al martillero capitalino que no cesaba en su ida y vuelta con los compradores.
Una fila y media de invernada era la recta final de un remate que logró tener una cantidad interesante de cabezas, siendo que era el primero del año. Terneros y terneras se colocaron a manos fieles que no se salieron del libreto ni de lo que les marcaba su calculadora, que si bien no abusaron en generosidad, tampoco estuvieron por debajo de lo que indica la época del año.
Pedro y Raúl Alonso Ganados concretó el primero del año y pese a que se les arrimó demasiado ya se está trabajando para el próximo en febrero, que si no surgiera ningún inconveniente, el miércoles 16 el martillo volverá a sonar.