Martín G. Lalor cumplió su primera vuelta al sol en los pagos de 25 de Mayo, y bajo los rayos que calentaron lindo la feria, las ventas caminaron a buen ritmo con haciendas que estuvieron a la altura de las circunstancias y compradores que pagaron bien lo embretado por Santiago y Francisco en la tarde de este martes 28 de febrero.

Con el objetivo de darle rodaje a una nueva feria se inició en camino para la firma capitalina en esta localidad de la provincia de Buenos Aires y con buenos encierres, y acompañamiento que se sumaba fecha a fecha, las ventas fueron tomando forma hasta llegar a su cumpleaños número uno. Pocos pero lindos lotes de consumo, vacas en cantidad y variedad, sumados a los toros, marcaban el inicio de una venta que tendría a Marín Lalor nuevamente a cargo del martillo en una feria.

Con el ímpetu que le pone el jefe cada vez que agarra el micrófono, la camioneta avanzó acompañando las manos de los operadores que se acercaron en busca del gordo. Vaquillonas y novillos salieron de buena manera, y la vaca, que gozaba de mejor estado, también quedando un poquito más castigada la manufactura y conserva, mientras que el toro no se corrió de los parámetros que muestra el Mercado.

Un conjunto de invernada mostraba el trabajo de los ganaderos de 25 de Mayo, y esta vez con jaulas completas, ponían a disposición una gran oferta de machos y hembras para que los engordadores se hicieran la panzada. Novillitos y terneros eran muy bien recibidos por la parte compradora, que haciendo sacar humo a las calculadoras, compraba sin dudar todo lo ofrecido en este aniversario.

Las hembras no se quedaron atrás y también encontraron oferentes que tenían en mente varios destinos, por un lado algunas vaquillonas destino madre, y por el otro llevarlas al corral para darles la terminación adecuada. Con firmeza, cuando el plazo apareció, la moneda también dijo presente, y al ritmo que le impuso Martín a la venta, la camioneta ligaba al final de una feria con corrales llenos.

Sencillito y de alpargatas salió un gran remate en 25 de Mayo, donde no solo se celebró un año de subastas, si no el gran trabajo que vienen haciendo Santiago Vilbazo y Francisco Minervini en pos de darle al productor un lugar firme donde poder vender bien sus haciendas.